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martes, 13 de marzo de 2018

Historia nº 19


VILLAMARTIN, DIECISEIS AÑOS DE INFARTOS
 

Las Historias que vengo trayendo al blog van desde el día 19 de diciembre de 1947 al 31 de mayo de 1963, 16 años, donde Villamartín pasó de la mediocridad al estar por encima de los pueblos de su categoría. Este avance jamás conocido en la localidad se debió a un administrador de correos natural de Romangordo (Cáceres), de 49 años, llamado D. Adolfo Blanco Caballero; casado con una de Villamartín, Dña. Adelaida Jarava Trujillo. El matrimonio tuvo dos hijas, Elisa y María del Carmen, ambas naturales de Villamartín, y hasta la fecha viven en la capital de la provincia, Cádiz.

A primero de septiembre del año en curso (1948) se reúne el cabildo en el que el presidente comenta a los concurrentes que era propósito de la Excma. Diputación provincial la ejecución de diversas obras para desarrollar e incrementar mejoras que favorezcan a todos los pueblos de la provincia según lo manifestaba su escrito de fecha 5 de julio del corriente. Con lo que respectaba al nuestro, era de todos conocido la urgente necesidad de reanudar las obras para el abastecimiento de aguas, cuyo proyecto se encontraba ultimado y en poder del expresado organismo provincial, por lo cual estimaba que en primer lugar procedía solicitar la ejecución de esas obras y en la siguiente, la construcción de dos Grupos escolares de cuatro secciones cada uno, por no reunir las debidas condiciones pedagógicas los locales destinados actualmente a escuelas nacionales de esta villa, y la de ocho viviendas para maestros, ya que de ellas se carecían. La Corporación solicitó de la Excma. Diputación todo lo anterior y ofreció a este organismo el terreno necesario para que en él se realicen las mencionadas obras y autorizó ampliamente al Sr. alcalde D. Adolfo Blanco Caballero para que pudiera formalizar cuantos asuntos fuesen necesarios hasta la total consecución de las referidas mejoras.
Foto 1
            En la Foto 1 se muestra al Excmo. Sr. D. Carlos María Rodríguez de Valcárcel, Gobernador Civil de la Provincia, acompañado de las autoridades locales paseando por las calles del pueblo en la visita que hizo para conocer la famosa feria de ganados, correspondiente al año 1948.
 
El 9 de febrero de 1949, después de presentadas y aprobadas las cuentas del año 1948, la presidencia dio cuenta, como en el orden del día se indicaba, de las gestiones que se venían efectuando con respecto a la traída de aguas, y, oficio de la Diputación referente a la ejecución del proyecto, garantía y empréstito; y habiendo surgido dudas sobre la interpretación del mismo, se acordó sean éstas aclaradas y seguir las gestiones con la máxima urgencia, al objeto de llevar a feliz término esa importante gestión, debiendo citar nuevamente al Ayuntamiento al indicado fin cuando la Comisión Permanente Provincial lo considerara.
Un mes después, el 25 de marzo se reunió el cabildo en sesión extraordinaria para tratar de proponer a la Excma. Diputación Provincial, las garantías suficientes del patrimonio municipal para el reintegro en las anualidades que en su día se concierte y que no serían inferiores a cincuenta anualidades, correspondientes al importe que resultare de la ejecución de las obras de traída de aguas y distribución de ellas en la población, conforme a los proyectos aprobados o que se aprobasen y con empréstitos que efectuara dicha Corporación para tal fin con el Banco de Crédito Local.
La Corporación Municipal teniendo en cuenta que el único medio para convertir en realidad una obra de tan imprescindible realización como de urgente necesidad, era que ésta se efectuara en la forma que se proponía, es decir, a través del empréstito que la Excma. Diputación hiciera al Ayuntamiento por medio del Banco de Crédito Local. La Corporación Municipal acordó por unanimidad, con referencia a ello, seis puntos que reproducimos solo el primero por ser el más importante: “1º. Ofreció a la Excma. Diputación Provincial lo que el Ayuntamiento consideraba garantía suficiente para responder del empréstito que para la ejecución de las obras dicha Corporación concertara, consistente esta garantía en todos los bienes, derechos, acciones de todas clases, propiedades del Ayuntamiento, así como los ingresos de sus presupuestos ordinarios, en la forma y con la prelación que se exigía por la referida Entidad Provincial, cuyas garantías serían sustituidas en su día con todo o parte del producto del agua, cuando llegara a su explotación”
Una semana más tarde, el 3 de abril, la Corporación por unanimidad acordó garantizar con sus propios bienes y recaudación de sus presupuestos ordinarios, las aportaciones voluntarias hechas por los vecinos en concepto de anticipos reintegrables con destino a la continuación de las obras de traída de agua, en vista de la apremiante necesidad de efectuarlo. La suma de estas aportaciones, serían devueltas a estos señores del importe del primer libramiento que efectuara Regiones Desbastadas, Confederación Hidrográfica del Guadalquivir o la Diputación Provincial que contribuían a la ejecución de la obra. En caso contrario el Ayuntamiento consignaría en sus presupuestos ordinarios de 1950 y 1951 tales sumas por mitades para pago de ese crédito.
El 18 de abril la Diputación Provincial contestó a la petición de préstamo para la traída del agua, consignando a la Corporación que enumerara específicamente las garantías que la Corporación ofrece. Ésta hizo una relación de bienes propiedad del Ayuntamiento cuya suma ascendía a 1.744.342,15 Ptas.
Desde el 18 de abril hasta el 26 de mayo dio tiempo a que la Alcaldía se trasladara a la capital de España a gestionar el asunto de la traída del agua. Esta última fecha fue la elegida para informar a la Corporación de su visita a los distintos organismos relacionados con la traída del agua a la población como eran Banco de Crédito Local, Regiones Desvastadas y Confederación Hidráulica recogiendo el buen deseo de todos ellos de ayuda y facilidad a los propósitos del Ayuntamiento, de acometer la obra seguidamente por los medios más fáciles y provechosos y era de ineludible necesidad el que el Ayuntamiento se decidiera en la forma que había de efectuarse el empréstito que precise realizarse para cubrir la diferencia que resultare entre las subvenciones ofrecidas y el total de los presupuestos de traída y distribución, bien sea ello directamente por el Ayuntamiento con el Banco de Crédito Local y a través de la Diputación Provincial. La Corporación Local acordó designar una Comisión compuesta por el Sr. alcalde D. Adolfo Blanco Caballero y los concejales D. Ramón de la Rosa Romero y D. Francisco Vázquez Mendoza los cuales acompañados por el secretario de la Corporación para que se trasladaran a Cádiz y con el amplio voto de confianza se entrevistaran con el Excmo. Sr. Presidente de la Diputación y demás autoridades interesadas en el asunto resolviendo y comprometiéndose si lo creían necesario  que el empréstito se hiciera a través de la Excma. Diputación Provincial, así como la obra en cuestión.
Foto 2
Los proyectos de traída de agua de los manantiales del Higuerón y de distribución de ella en la población, confeccionados por el Ingeniero de Caminos D. Carlos Gozálbez Martínez, fueron presentados a la Corporación el día 2 de junio. Los dos proyectos estaban ya en ejecución por administración e importaba el primero 1.889.571,71 Ptas. y el segundo 1.493.417,16 Ptas. La Corporación Municipal acordó por unanimidad prestar su aprobación más completa a los mismos.
Otro tema importantísimo para la Corporación presidida por D. Adolfo Blanco Caballero era la enseñanza en el pueblo, y el escrito núm. 1192 de la Excma. Diputación Provincial vino en el momento justo; en él se hacía referencia a la construcción de escuelas y casas-viviendas para maestros, mediante presupuesto reintegrable en la forma que se concierte. El Ayuntamiento acordó acogerse a este asunto.
La adjudicación de las obras de la traída del agua se realizó el 19 de julio en las dependencias de la Diputación Provincial asistiendo los siguientes contratistas de obras de Villamartín: D. Arturo Redondo, D. José García, D. Manuel Castellano, D. José Pascual, D. Manuel Ferrán y Valentín García. La Corporación creó una Comisión formada por el alcalde y los concejales Morales Andrades, Vázquez Mendoza y López Peña, y el secretario para asistir al referido acto para resolver con la amplitud que fuera precisa.
Como el día 29 de julio Regiones Desvastadas había hecho un libramiento de la subvención acordada a tal fin, la Corporación aprobó y procedió a la devolución de tales cantidades a los interesados particulares que habían aportado voluntariamente cantidades en concepto de préstamo reintegrable, como se acordó el 3 de abril pasado.
Pasado un mes visitaron la Alcaldía tres arquitectos de la Excma. Diputación con vista a la construcción de Grupos Escolares y casa habitación de maestros por mediación y con la garantía de la Diputación Provincial, garantía ésta que a su vez el Ayuntamiento ofrecería a la Corporación Provincial.
A finales del mes de octubre se comunicó por la Corporación Provincia que había sido aprobado por el Consejo del Banco de Crédito Local de España el empréstito solicitado para cubrir la parte que al Ayuntamiento corresponde en el proyecto aprobado de la red de distribución de agua a la población.
Para terminar el año sobre los temas que llevamos entre manos, el 30 de noviembre se dio cuenta al Cuerpo Capitular de la comunicación del Ilmo. Sr. presidente de la Diputación de 27 de octubre, a la que acompaña presupuesto y proyecto para la construcción en esta población de un Grupo Escolar de tres secciones, tres viviendas para maestros y de urbanización y alcantarillado cuyo importe total asciende a la suma de 668.494,66 Ptas. y fue acuerdo unánime de los Sres. asistentes.
Un nuevo reto entró de lleno en el cabildo de la localidad a principio del año 1950; el 25 de febrero, el alcalde dio cuenta a la Corporación del acuerdo adoptado por el Consejo Local de F.E.T. y de la J.O.N.S relacionado con la construcción en la villa de un grupo de 40 viviendas ultra-baratas, análogas a las recientemente construidas en Algeciras, con la ayuda económica del Patronato Social “José Antonio”. Continuó diciendo que para la realización de estas obras y con el fin de conseguir la máxima ayuda del indicado organismo sería preciso que por el Ayuntamiento se cediera gratuitamente los terrenos para su emplazamiento y una aportación en metálico, consistente en el 15 % del importe total de las obras. Oído al alcalde, la Corporación quedó de acuerdo en todas las condiciones.
El tema de la traída y distribución del agua en la localidad llegó el 29 de marzo a un punto sin retorno; en sesión extraordinaria se reunió el Cabildo bajo la dirección de D. Adolfo Blanco Caballero, pero este cabildo no fue uno más, en él se encontraban el Sr. D. Antonio Gutiérrez, diputado provincial que ostentaba la representación del Ilmo. Sr. Presidente de la Excma. Diputación asistido por el Interventor de fondos provinciales D. Manuel Cerón Bohórquez, y el Sr. Interventor de fondos municipales D. Sebastián Moreno Garrido, con el fin de leer y formalizar el borrador del acuerdo llegado sobre el préstamo concedido por el Banco de Crédito Local a través de la Diputación Provincial. El día siguiente, en declaración de urgencia, fue aprobado dicho borrador por unanimidad.
En junio de los corrientes casi estaba terminada la distribución de agua a la localidad, pero se necesitaba instalar en los domicilios particulares los contadores que controlaran la cantidad suministrada por el escaso caudal con que se contaba, acordando por unanimidad en principio no autorizar el suministro de agua a los domicilios particulares hasta tanto no instalen sus respectivos propietarios los correspondientes contadores, acogiéndose al reglamento de Sanidad Municipal de 9 de febrero de 1925.
Foto 3
Con vista a que el próximo 18 de julio se inaugurasen las obras de abastecimiento y distribución de aguas en la población, el cabildo del 26 de junio facultaba al Sr. alcalde para que de una forma directa contratara el personal más idóneo para la construcción de una fuente en la plaza de José Antonio (Foto 3).
El 9 de julio se celebró una sesión en donde el alcalde D. Adolfo blanco Caballero se dirigió al pleno diciéndoles que habían sido muchas las veces que se han reunidos en forma ordinaria o extraordinaria, para tratar asuntos relacionados con la traída de agua potable. Y en todas ellas veían muy lejano el día en que se tendrían que reunir para tratar sobre la inmediata inauguración de la inicial marcha del servicio. Ese momento, que no vacilaba de llamar solemne, había llegado ya, colmando sus anhelos y satisfaciendo plenamente sus ansiedades al ver hecha una obra cuyas dimensiones no pueden medirse sino cuando se proyecta en el futuro, como ocurre siempre, en todos los acontecimientos que rebasan los límites de lo normal, aunque como este caso se encierra, en los modestos límites de lo local. Continuó el alcalde agradeciendo a todos los miembros de la corporación su colaboración mas sincera, al Gobernador Civil y al Presidente de la Diputación que eran a ellos quien Villamartín debían más por el celo mostrado en esta mejora. También recibieron elogios del Sr. alcalde, los dos ingenieros, así como los contratistas. 
Foto 4

En este cabildo se creó una comisión compuesta de tres miembros de la Corporación para que se encargase de la organización de cuanto sea necesario con motivo de los actos a celebrar el próximo día 18 de julio. Proponiéndose para ello a los Sres. concejales D. Ramón Morales Andrades, D. Francisco Vázquez Mendoza y D. Ramón de la Rosa Romero que aceptaron gustosos.
Otro asunto tratado en este cabildo fue la creación del Servicio de Aguas con su contrato entre los particulares y la Corporación Municipal derivados de las concesiones de suministro de agua potable a los mismos.
Foto 5
Llegado el 26 de julio de 1950 se puso en marcha los planes ideados por la comisión encargada de la organización. Las autoridades locales recibieron a las provinciales y juntas inauguraron los edificios construidos y ofrecieron en la plaza diversos discursos.
Con mayor tranquilidad que los días pasados, se celebró una sesión pública ordinaria el día 31 de julio en la cual el secretario, D. Manuel Bocanegra Camacho, dio lectura a una moción de la Alcaldía Presidencia de fecha 31 de julio de 1950 relativa en todas sus partes a un merecido elogio de las Autoridades Nacionales y Provinciales que contribuyeron de forma tan ejemplar a la terminación de las obras de Abastecimiento y Distribución de agua potable de la villa; obras, que se pudieron llamar gigantescas, de cuya envergadura no registraba otra la Historia de Villamartín. En su consecuencia, vistas las razones expuestas y las circunstancias excepcionales que concurrían en la recia personalidad del Excmo. Sr. D. Blas Pérez González, Ministro de la Gobernación, que desde su alto cargo demostró una constante preocupación por los problemas de la villa, desde los momentos críticos porque atravesó en la epidemia de tifus sufrida el pasado año 1949; del Excmo. Sr. D. Carlos María Rodríguez de Valcárcel, por su incansable batallar hasta la consecución de este fin y del Ilmo. Sr. D. Juan Luis Martínez del Cerro, Presidente de la Excma. Diputación Provincial por su laboriosa y acertada dirección en la iniciación y realización de estas obras y su desinteresada gestión cerca de los Organismos que las han subvencionados, acordaron por unanimidad:
                1º. Nombrar al Excmo. Sr. Ministro de la Gobernación D. Blas Pérez González, hijo adoptivo de la villa.
                2º. Dar el nombre de Blas Pérez González a la calle El Rosario de esta población.
                4º.  Nombrar hijo adoptivo de la villa al Ilmo. Sr. Presidente de la Excma. Diputación Provincial D. Juan Luis Martínez del Cerro.
                5º. Que constara en acta la gratitud de la Corporación y del Pueblo de Villamartín hacia las tres Ilustres Personalidades citadas.
                6º. Facultar ampliamente al Sr. Alcalde Presidente D. Adolfo Blanco Caballero para la realización y organización de cuanto fuere necesario para el más rápido cumplimiento de estos acuerdos.
Foto 6
Así mismo, a propuesta de la Presidencia y por unanimidad, los Sres. asistentes se solidarizaron con el acuerdo adoptado por la Comisión Municipal Permanente del 28 actual, reconociendo la brillante labor realizada por los Sres. Morales Andrades, Vázquez Mendoza y de la Rosa Romero, componentes de la Comisión designada para la organización de los actos celebrados con motivo de la inauguración del servicio de aguas y acordaron por unanimidad: Que constase en acta un voto de gracias y una efusiva felicitación del Ayuntamiento Pleno por el brillante éxito obtenido en la organización de los actos de la inauguración del servicio de agua; que constara en acta la gratitud del Pleno a aquellos vecinos que prestaron su desinteresada colaboración a la Comisión y que redundó en el mayor éxito conocido en la Historia de Villamartín; y que se diera traslado de este acuerdo a los interesados para su conocimiento y satisfacción.
Por último, concluyo la Historia de la traída y distribución de agua potable a la población con la plantilla del nuevo Servicio de aguas. El Ayuntamiento conoció y aprobó la plantilla de personal del nuevo organismo local que tenía que regir en el próximo ejercicio económico de 1951:
-          Un auxiliar administrativo con 6.000 Ptas.
-          Dos auxiliares mecánicos, uno de noche con 5.500 Ptas. y otro de día con 4.000 Ptas.
-          Un lector cobrador de contadores con 5.000 Ptas.
-          Un fontanero que tendría a su cargo el cuidado y conservación de la red tanto de abastecimiento como de distribución con 7.000 Ptas.

sábado, 10 de marzo de 2018

Historia nº 18


VILLAMARTIN, DIECISEIS AÑOS DE INFARTOS

Las Historias que voy a traer desde hoy al blog, van desde el día 19 de diciembre de 1947 al 31 de mayo de 1963, 16 años, donde Villamartín pasó de la mediocridad al estar por encima de los pueblos de su categoría. Este avance jamás conocido en la localidad se debió a un administrador de correos natural de Romangordo (Cáceres), de 49 años, llamado D. Adolfo Blanco Caballero; casado con una de Villamartín, Dña. Adelaida Jarava Trujillo. El matrimonio tuvo dos hijas, Elisa y María del Carmen, ambas naturales de Villamartín, y hasta la fecha viven en la capital de la provincia, Cádiz.
 
PRIMERA ENTREGA   (19-12-1947 a 28-04-1948)

Todo empezó en una sesión pública ordinaria de 2ª convocatoria celebrada por la Comisión Gestora del Ayuntamiento de Villamartín el día 19 de diciembre de 1947.
Varios días ante de esta fecha tuvo lugar la toma de posesión de esta nueva Gestora presidida por D. Adolfo Blanco Caballero, en sustitución a la presidida por D. Luis Mozo Carrancio.
En el cabildo siguiente, la Corporación decidió que con motivo de las fiestas de navidad en que la cristiandad conmemoraba el nacimiento del Hijo de Dios y con el objeto de que esa fiesta religiosa pudiera celebrarse con alegría en los domicilios de los funcionarios, empleados y obreros municipales, que se abonase a los citados empleados en concepto de aguinaldo, una paga extraordinaria consistente en el importe de una mensualidad líquida de sus respectivos haberes.
A principio de enero ya estaba preparado el nuevo concierto con el gremio fiscal de los cafés, bares y locales similares ya que el anterior no se ajustaba a los artículos 51 y 282 del Decreto ordenado por Hacienda. Este nuevo concierto contenía 10 puntos. También se hizo nuevo concierto por contribución de uso y consumo. Y se sentaron las bases para el nuevo concierto con los labradores.
Terminada la discusión de los asuntos que figuraban en el orden del día para la sesión del 19 de febrero, el Sr. presidente hizo uso de la palabra y dirigiéndose a los señores gestores, dijo: “Ha llegado la hora de vuestro cese; en el día de mañana quedará constituida la nueva Gestora designada por el Excmo. Sr. Gobernador Civil de esta provincia, según comunicación recibida oportunamente y rogaba a los señores concurrentes, que asistan con puntualidad a la sesión pública extraordinaria que con tal objeto se ha de celebrar en esta casa capitular a las trece horas del indicado día contribuyendo con su presencia a la mayor grandeza del acto, y con ello quedará patente el espíritu de hermandad y camaradería que debe reinar y reina entre los Gestores entrantes y salientes. Hace constar la Presidencia su agradecimiento hacia los Señores Gestores que han de cesar, por la colaboración que éstos en todo momento le han prestado ayudándole a resolver con espíritu de justicia cuantos asuntos han sido sometidos a la consideración del Ayuntamiento, y esperaba de todos que a pesar de que dejan el cargo que ostentan no negaron a la Alcaldía su colaboración”.
El día siguiente, a las trece horas, en la casa Capitular el secretario dio lectura a la comunicación del Excmo. Sr. Gobernador Civil de la provincia, que literalmente decía:
              “En son de las atribuciones que me confieren las disposiciones vigentes he acordado renovar totalmente la Comisión Gestora Municipal de la localidad, que quedará constituida en la forma siguiente:
               Alcalde-presidente, D. Adolfo Blanco Caballero; Primer teniente de alcalde, D. Gabriel Jarava Troncoso; Segundo teniente de alcalde, D. Luis Mozo Carrancio; Gestores, D. Vicente Jarava Trujillo, D. Mateo Manzano Montes, D. Francisco Romero Candau, D. Basilio López Peña, D. Ramón Morales Andrades, D. Francisco Vázquez Mendoza, D. Bernardo Bernal Íñigo, D. Santiago Tinoco Ramírez y D. Ramón de la Rosa Romero.
              Lo que comunico a V.S. para su conocimiento, el de la Corporación e interesados, a sus efectos correspondientes, debiendo devolverme una vez efectuada la posesión de la nueva Gestora debidamente cumplimentada el estado que se le acompaña.
             Dios guarde a V.S. muchos años.
             Cádiz 16 de febrero de 1948
             El Gobernador Civil, Carlos Mª Rodríguez de Valcárcel [Firmado y rubricado]”
Fig. 1
Tras despachar los asuntos pendientes y urgentes, y hacer caso a las recomendaciones del Gobernador Civil referente a tener en Madrid a una persona que velaras por los asuntos del pueblo en las altas esferas, se preparó todo para hacer entrega de las primeras viviendas económicas que se construían en Villamartín. En cabildo de 5 de abril del año en curso se informó a los capitulares de la sesión celebrada el 15 de marzo por la Junta Local de Beneficencia y Obras Sociales para dar cuenta de la labor desarrollada por el citado organismo, como delegado de este Ayuntamiento, sobre la construcción de un grupo de ocho viviendas ultra-económicas en el sitio conocido por “Llanos de la Noria”. Así mismo puso de manifiesto a la Corporación todos los documentos y antecedentes que obraban en poder de la mencionada Junta, así como la liquidación definitiva de cuentas por ella practicada con el contratista de las obras D. Sebastián Mendoza Mena. La Comisión Gestora oído el informe del Sr. alcalde-presidente de la citada Junta, y después de examinar detenidamente las cuentas definitivas de la repetida Junta y 


Fig. 2
todos los demás documentos y antecedentes presentados por el alcalde, le dio el visto bueno por unanimidad. Las citadas viviendas tuvieron un coste de 320.000 Ptas. A petición del alcalde se designó el grupo de casas construido con el nombre de Nuestra Señora de Las Montañas y a la calle con el nombre del Sr. Gobernador Rodríguez de Valcárcel. Las fotos adjuntas (Fig. 1, 2) plasman el 19 de abril de 1948 el momento de la entrega de las llaves a los beneficiarios por el gobernador Civil de la provincia D. Carlos Mª Rodríguez de Valcárcel.
Como anécdotas a estas entregas hay que resaltar que la Corporación Municipal hizo constar en acta el agradecimiento de ella a D. José Mª Téllez Moreno que galantemente puso a disposición de la Alcaldía su coche automóvil para que fuese utilizado por la Comisión que del seno del Ayuntamiento había de recibir al Excmo. Sr. Gobernador Civil de la provincia en su visita a ésta. Igualmente, a D. Francisco Vázquez Mendoza por su acertada dirección en los trabajos de exorno del lugar donde se encontraban situadas las casas ultra-económicas.
Fig. 3
A la vista de que pasaba el tiempo y por las noches no se veía en la calle Rodríguez de Valcárcel, Domingo Galvín Morales y demás beneficiarios de las casas ultra-económicas, pusieron un escrito a la Alcaldía significando que carecían de alumbrado público. La corporación resolvió el problema colocando dos lámparas de 25 vatios, a cada uno de los extremos de la referida vía.
Otro asunto urgente y pendiente de años atrás era dar a las fuerzas de la Guardia Civil unas viviendas dignas, pero este tema queda en este trabajo “parado” ya que en este mismo blog hay un trabajo titulado “GUARDIA CIVIL EN VILLAMARTIN” que corresponde a la Historia nº33, donde te puedes informar ampliamente.